Para la creación de cualquier tipo de producto siempre existirán metodologías que ayudan desde la creación hasta la entrega de los productos, dependiendo el tipo de metodología que se utilice, así mismo estas metodologías van evolucionando a lo largo del tiempo, con el fin de ser más productivas y eficaces.
Dentro del ámbito del desarrollo de software también existen metodologías las cuales son un conjunto de técnicas y métodos que ayudan a organizar a los equipos de trabajo para que estos desarrollen las funciones de un software de la mejor manera posible.
Cuando se trata de desarrollar productos o soluciones para un cliente o mercado concreto, es necesario tener en cuenta factores como la planificación, costos, dificultad, equipo de trabajo disponible, lenguajes, entre otros.
El desarrollo de software puede ser un sector especialmente complejo, sobre todo cuando se trata de grandes aplicativos y equipos de trabajo. Es aquí donde las metodologías son un factor clave para realizar el trabajo de una manera más organizada posible, ordenar tareas, agilizar los procesos y entregar un producto de calidad, ayudando a evitar problemas, errores, retrasos y una mala calidad del producto.
En la actualidad existen dos grupos de metodologías de desarrollo de software: las clásicas y las ágiles. A continuación, se explican las características de cada una de ellas.
Metodologías clásicas de desarrollo de software
Estas metodologías se caracterizan por la definición total de los requisitos al inicio del proyecto, siendo estas muy poco flexibles y sin permitir cambios, trabajando de forma lineal, es decir no se puede empezar una nueva etapa sin terminar la otra y así mismo no se puede volver hacia atrás una vez que se ha concluido una etapa, las principales metodologías clásicas son:
Cascada
Es una metodología que se organiza de arriba hacia abajo y sigue ese mismo flujo de trabajo como una cascada constando de cinco etapas: Análisis, Diseño, Creación de código, Pruebas y Mantenimiento, mismas que se llevan de forma lineal y no se puede pasar a la siguiente etapa sin haber concluido la anterior.
Prototipo
Se basa en la construcción de un prototipo que se crea de una manera muy rápida a fin de que los usuarios puedan probarlo y que aporten retroalimentación, con el fin de arreglar lo que este mal o incluir otros requerimientos que puedan surgir, siento esta metodología un modelo iterativo de prueba y error para comprender las especificidades del producto.
Espiral
Este es una combinación de las dos metodología anteriores, que consta de cuatro etapas: Planificación, Análisis de Riesgo, Implementación y Evaluación. El funcionamiento de esta metodología consiste en seguir ciclos crecientes de cuatro fases cada uno, que se van realizando siguiendo una forma de espiral y conforme más cerca este del centro más avanzado esta el proyecto. En cada ciclo se pasa por dichas fases definidas, como en el modelo de cascada, pero con capacidad de cambiar su complejidad con cada ciclo. Por lo tanto conforme se vaya cambiando aumentara el tiempo de desarrollo, complejidad de la gestión de riesgos y la planificación.
Incremental
En esta metodología el software se va construyendo de manera progresiva. En cada etapa se van agregando nuevas funcionalidades, permitiendo ver resultados de una manera más rápida e incluso con la ventaja de poder utilizarlo antes de que se complete totalmente el software.
Diseño rápido de aplicaciones (RAD)
Esta metodología permite desarrollar software de alta calidad en un corto periodo de tiempo. Se basa en cuatro etapas: Definición de Requisitos, Prototipo, Construcción Rápida y Recopilación de Resultados y Finalización de producto/Implementación. Esta se centra centra en desarrollar aplicaciones rápidamente a través de iteraciones frecuentes y comentarios continuos.
Metodologías ágiles de desarrollo de software
Este tipo de metodologías se basan en la metodología incremental, en la que ciclos pequeños de desarrollo van agregando nuevas funcionalidades a la aplicación final. En ellas se busca crear en poco tiempo pequeñas funcionalidades en lugar de grandes cambios, permitiendo enfoques flexibles y trabajo en equipo para ofrecer mejoras constantes.
Estas metodologías cuentan con cuatro características fundamentales que se deberían priorizar por encima de otras cuestiones, descritas a continuación:
- Las personas y las interacciones antes que los procesos y las herramientas.
- El software en funcionamiento antes que la documentación exhaustiva.
- La colaboración con el cliente antes que la negociación contractual.
- La respuesta ante el cambio antes que el apego a un plan.
Las metodologías ágiles de software son las que más se utilizan hoy en día debido a su flexibilidad y agilidad para la creación de software, las principales metodologías ágiles son:
Kanban
Consiste en dividir las tareas y organizarlas en un tablero de trabajo dividido en: Lista de tareas, En desarrollo, Pruebas, Despliegue y Terminado. De este modo, se crea un flujo de trabajo visual basado en tareas prioritarias e incrementando el valor del producto.
Scrum
Esta metodología se itera sobre bloques de tiempo cortos y fijos (generalmente entre dos y cuatro semanas), para conseguir un resultado completo en cada iteración. Contando de cuatro etapas: Planificación de la iteración, Ejecución, Reunión diaria, y demostración de resultados.
Lean
Se basa en un modelo de gestión de pequeños equipos muy capacitados para que elaboren cualquier tarea en poco tiempo, centrándose en siete principios: Eliminar desperdicio, Crear conocimiento, Calidad de construcción, Entrega rápida, Empoderamiento del equipo, Posponer decisiones y Optimización de toda la cadena de valor.
Programación extrema (XP)
Es una metodología basada en mejorar las relaciones interpersonales como clave para el éxito en desarrollo de software, promoviendo el trabajo en equipo, preocupándose por el aprendizaje de los desarrolladores, y propiciando un buen ambiente de trabajo. Esta metodología se centra en retroalimentación continua entre el cliente y el equipo de desarrollo, comunicación fluida entre todos los participantes, simplicidad en las soluciones implementadas y coraje para enfrentar los cambios.
Todas estas metodologías son o han sido utilizadas por la mayoría de las compañías que desarrollan software, siendo las metodologías ágiles de software un referente en los últimos años por la flexibilidad y beneficios que ofrecen que ofrecen.